jueves, 26 de enero de 2012

Amor secreto

Él, un joven lleno de optimismo y energía frente a la vida.

Ella, una mujer indecisa e insegura.

Ellos, una pareja inestable, que no tenían un rumbo fijo pero aún así unidos por el gran amor que se profesaban.

Él todo el tiempo le imploraba que de una vez por todas aceptara ante el mundo lo que sentía, ya que él ya había decidido afrontar sus sentimientos, lo cual no era tan fácil porque toda su vida había sido un hombre poco serio, pero esta vez estaba dispuesto a hacer todo por ese amor.

Ella no sabía qué hacer, sacaba cada vez una mejor excusa para intentar aplazar ese momento, aunque estaba muy segura de lo que sentía, tenía miedo, ese miedo que a muchos nos invade y nos hace tan infelices. Ella no quería aceptar las cosas, porque tal vez al hacerlo ese pequeño mundo de fantasía se destrozaría en segundos dejando heridas incurables. Le pedía a él todo el tiempo que no le rogara más, que el amor secreto era mejor y menos rutinario, pero él seguía insistiendo, quería gritarle al mundo tanto amor que tenía guardado.

Aparentemente ellos eran tan felices con su amor poco normal, escondido de la sociedad, ella tan feliz de que la tan temida monotonía no los afectara; mucho menos las críticas de las clases sociales, pero él guardaba en su corazón un vacío y el temor de que todo se desvaneciera rápidamente.

Luego de mucho tiempo, ella accede a darle el gusto a su amante de gritar ese preciado secreto, tan sagrado y puro; él feliz no ve la hora de por fin cumplir su tan anhelado deseo. Y por fin lo cumplen, le cuentan al mundo entero su felicidad, como era de esperarse muchos lo reciben muy bien, otros no tanto, pero ellos eran tan felices que nada de eso los podía afectar, ni acabar con esa satisfacción.

Pasan los días, esa felicidad se va desvaneciendo con el tiempo, ella en secreto aún teme no volverlo a ver y al parecer es así; él ya no se ve tan feliz su sonrisa se ha desdibujado de su rostro notoriamente y del rostro de ella también, ambos sufren en silencio, han dejado que su amor se desgaste por la sociedad con su envidia y aquellos que al verlos en la calle los miran con desdén, pero también el aburrimiento e indiferencia los ha afectado.

Sin saber qué hacer, sin mencionar una sola palabra entre ellos después de mucho tiempo, deciden romper esa barrera y enfrentar su destino, deciden seguir cada uno en soledad, separar sus cuerpos luego de tanto amor prometido, dejar que el tiempo decida lo mejor para cada uno de ellos, mientras que emprenden un nuevo camino lejos del otro.

No todos tienen un final feliz, mucho menos los amores que tanta estabilidad aparentan, ellos con sus vidas tan diferentes y separadas, lograron ser felices aunque con ese sentimiento vacío que sus almas; que compartieron una vez y de la misma manera partieron, dejaron para siempre.